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La época de cría es la más crítica para la conservación de las poblaciones de especies protegidas, que pueden verse afectadas por las molestias que producen las obras, llegando incluso a abandonar los nidos, en el caso de las aves, perdiendo la descendencia de ese año.
Desde mediados de mayo hasta finales de julio, se puede observar un elevado número de crías de una gran variedad de especies de avifauna, mamíferos y reptiles. Muchas de estas especies están incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, teniendo que tener un especial cuidado para no afectar su reproducción y desarrollo.
Las especies de aves son las que con mayor facilidad podemos encontrar debido a sus hábitos y a su dificultad a la hora de volar por parte de los individuos juveniles.
Normalmente, estas obras cuentan con condicionados ambientales como el control de los nidos, la prohibición de realizar voladuras en primavera y/o verano o de usar maquinaria pesada cerca de los nidos de ciertas especies.
Este año, en Paleoymás, estamos trabajando en dos proyectos de este tipo. Un proyecto relacionado con la ampliación del regadío en un municipio de la provincia de Zaragoza, donde estamos visitando los nidos de cernícalo primilla (Falco naumanni), catalogado como sensible a la alteración del hábitat en Aragón.
Los hemos seguido durante dos meses hasta que ¡han conseguido alzar el vuelo!.
Juveniles de cernícalo primilla (Falco naumanni)
El segundo proyecto, de aproximadamente seis meses de seguimiento, consiste en la observación de patrones reproductivos, ocupación de nidos y finalmente monitorización de los polluelos de milano real (Milvus milvus), catalogado como en peligro en España. Todo ello, en relación a un tramo de autovía de nueva construcción en la provincia de Huesca.
Este año, tres polluelos sanos han nacido y se han “emancipado” en el entorno de la obra y actualmente la empresa constructora ya puede reanudar su actividad plena.
Juveniles de chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax)
Pero, no solo las grandes obras pueden suponer un trastorno para las parejas y sus crías.
Entre los consejos de actuación para la ciudadanía que disfruta del entorno que nos rodea durante este periodo de tiempo, figura la recomendación de no tocar nidos, no alterar los lugares a los que se acude, no coger pollos ni crías de cualquier especie ya que los progenitores siguen aportando comida y vigilándoles desde la distancia.
Mantener a los perros vigilados evitando que abandonen los caminos o las zonas habilitadas para su ejercicio, manteniéndolos atados si no es posible. Evitar las salidas al campo de los gatos domésticos ya que son depredadores de numerosas especies de aves, mamíferos y reptiles. También se recomienda a los usuarios de vehículos a circular solo por los caminos autorizados para no adentrarse y dañar los espacios donde las especies anidan y se refugian.
Con estas actuaciones favoreces a la proliferación de las especies autóctonas asegurando así su permanencia para los años venideros, las cuales nos aportan equilibrio en los ecosistemas y otros muchos beneficios como el disfrute de su compañía, manteniendo así la biodiversidad de nuestro entorno natural.
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